Cuando pienso en la Pascua, pienso en acompañar al Señor, en hacer el mismo camino que él hizo en su Pasión para llegar a la Resurrección. Y pienso en hacer malabarismos para asistir a los oficios y a las procesiones (ya que soy nazarena). Este año, la cuarentena me ha dado la mejor Pascua en mucho tiempo.
No sólo me he sentido más cerca del Señor, sino que,  me he sentido más cerca de todos los jóvenes y personas que han participado en esta Pascua Joven. Porque gracias a su esfuerzo y dedicación hemos podido vivir, aprender, sentir, acompañar, orar y celebrar la Pascua en familia.
El Vía Crucis, las catequesis, la oración joven, la celebración penitencial y la emocionante adoración a la cruz junto con los oficios, han sido el cóctel perfecto. Sólo puedo dar gracias a Dios por estas grandes experiencias. Feliz Pascua.
Mª Estrella Moreno